La felicidad de los daneses; mito o realidad

Muchos de vosotros, afanados lectores, me habéis preguntado sobre mi visión de eso que todos cuentan; los daneses son más felices. ¿Es una realidad que en Dinamarca se vive más feliz? ¿Es este país la Tierra de las Oportunidades que garantiza una existencia mejor?

Creo que la respuesta es múltiple. Como es de esperar no me dispongo a daros un ‘no’ o un ‘sí’, pretendo que me leáis un ratito más.

Un estudio tras otro, de distintos organismos internacionales llenos de sesudos investigadores, coloca a este pequeño trocito del mundo como el lugar más feliz. El Valhala terrenal. Como siempre hay espacio para la discrepancia, recientemente hay un estudio que los coloca solamente terceros, tras Panamá y Costa Rica.

Al mismo tiempo, entre los muchos de los que vivimos aquí pero no somos daneses, solo humildes nuevos habitantes de este Edén de la Existencia (nydansker como nos llaman), hay una ruidosa mayoría de personas que odian Dinamarca o les hace sumamente infelices. ¿Será la envidia?. Yo desde luego no me encuentro en ese grupo. Jeg elsker Danmark.

De una u otra forma, creo que los daneses si son por lo general felices. Están satisfechos con sus vidas y están orgullosos de su forma de vivir. La mayor objeción que tienen sobre su país suele ser el clima. Sin embargo, cuando profundizas más, sus preocupaciones se parecen mucho a las de otros europeos. Puede que quizá sintonicen la vida con otra intensidad, de igual forma los problemas.

Hay mucha gente que me dice que la felicidad de los daneses encuentra su explicación en que sus expectativas vitales son menores. Son más felices simplemente porque esperan menos de la vida. Esta es una de las explicaciones que más consistentemente me encuentro cuando pregunto sobre esto, lo he visto escrito, incluso, en algún artículo en la prensa.

He de deciros que creo que esta explicación, la ausencia de expectativas, proviene claramente de la envidia. Carece de fundamento.

En otros casos la explicación es algo más elaborada. Los daneses son felices porque su sociedad es más igualitaria económicamente, también ha conseguido una igualdad mayor entre géneros, tiene cohesión social, es una sociedad más rica, ofrece seguridad a sus ciudadanos, existe más libertad de pensamiento…  A todo esto le añadiría yo el hecho de que es una sociedad volcada en la vida familiar en los primeros años de la vida de los hijos y existe un extraordinario equilibrio entre vida profesional y vida personal.

Pero, ¿es todo esto verdad? ¿es realmente una sociedad así?

Igualdad económica

Respecto a la igualdad económica, lo primero que hay que decir es que es muy difícil medirla. Si nos referimos a la igualdad en términos de ingresos os pongo a continuación un mapa del mundo que representa la igualdad utilizando el índice Gini. No soy un experto en estos temas y seguro que alguno de mis lectores se echará las manos a la cabeza, pero creo que es una manera objetiva y rápida de juzgar. Como veis Dinamarca esta en ese privilegiado verde oscuro del norte de Europa que certifica esa igualdad económica.

Los datos mas recientes sitúan a tres países con el índice Gini mas bajo, 25 unidades, (por tanto mas igualitarios, la igualdad total seria un valor de 0): Dinamarca, Japón y Suecia.

Igualdad de genero

Para tratar de comprobar si Dinamarca es mas o menos igualitaria respecto al genero es mucho mas difícil encontrar algo que me convenza. No obstante utilizare el Global Gender Gap Index. Lo mas malo que tiene este índice es que su autoría corresponde al Foro Económico Mundial (conocido como Foro de Davos) y, bueno, no es que yo sea el mayor seguidor de esa organización…

El caso es que meten en un numerito parámetros como la participación en la vida económica, los niveles educativos, la participación política o la salud.

Nuevamente Dinamarca aparece en verde pero esta vez no del color mas oscuro de los posibles. Si la igualdad total fuese un valor de 1, Dinamarca alcanza 0,7779 en el año 2013. Esto supone que, de los 140 países analizados, Dinamarca esta solamente el noveno, correspondiendo los primeros lugares a a Islandia y Alemania y, a España, el honroso puesto 30 del ranking.

Cohesión social

Otra gente que tampoco es precisamente mi favorita, la OCDE, define una sociedad cohesionada, aquella que busca el bienestar de sus miembros, lucha contra la exclusión y crea sensaciones fuertes de pertenencia y confianza colectiva.

Aquí no os puedo traer un mapita porque cuanto mas nos sumergimos en las ciencias sociales mas difícil me resulta encontrar algo tan cuadriculado como a mi me gustaría. Pero bueno, os traigo aquí un estudio de Bertelsmann Stiftung que coloca a Dinamarca liderando una lista de países con alta cohesión social. España se sitúa en este caso en el puesto numero 17.

He de decir que cuando he leído el estudio, muchos planteamientos me han parecido aparentemente equivocados (que hace Estados Unidos, una sociedad salvajemente individualista, en el puesto 8) pero es cierto que en el estudio excluyen los efectos de la desigualdad económica y los sistemas de seguridad social que son tratados en otro ranking independiente.

¿Es rica Dinamarca?

En términos absolutos Dinamarca es una economía relativamente pequeña, su PIB nominal en 2012 era el numero 33 en una lista de 193 países. España es, por el contrario, la decimotercera economía mundial a pesar de la larga crisis. Sin embargo el PIB per capita danes es el décimo noveno mundial (corregido con el nivel de precios) y sus alto grado de igualdad consigue que su renta per capita, que ronda los 60.000 dolares nominales, se aproxime a lo que muchos daneses pueden disponer. Corregido a paridad de poder de compra representa 37.800 dolares que, no están mal, comparando con los 30.432 dolares de los españoles cuyo país es, además, tremendamente mas desigual.

De forma que sí, Dinamarca es un país muy rico.

La seguridad

Para tratar de ser algo mas moderno, en lugar de usar una fuente oficial respecto a esto, empleare una fuente de la Internet 2.0, Numbeo. Numbeo dispone de un índice de seguridad que sitúa a Dinamarca en el numero 16 y además me permite poneros otro mapita. España se encuentra en el numero 36 de ese ranking de 139 países analizados.

Libertad de pensamiento

Y como hoy me ha salido un post de mapas y numeritos, me llena de orgullo y satisfacción deciros que también hay alguien que mide la libertad. Menuda contradicción. La organización Freedom House (que según me susurra Wikipedia tiene un sesgo de nuestros amigos de Norteamérica) sitúa a Dinamarca, y esta vez también a España, en el color verde (ese es el bueno).

Entonces, ¿esta claro?

Pues bien, parece que efectivamente se cumplen las premisas que hacen de Dinamarca el país ideal para ser feliz. El país de la igualdad, la cohesión social, donde se dispone de recursos, que te abraza con su seguridad pero no te aprieta y te deja libre.

… ¿y si la libertad está en el ADN?

Sin embargo, tras currarme todo este ladrillo de datos y mapas que ya os tenia convencidos… resulta que hay unos científicos que ponen mi pequeño ensayo de ciencia social barata en la lista de papeles para la trituradora.

La respuesta esta en los genes!!!

La Universidad de Warwick (Departamento de Economía) ha concluido que es el ADN danés el verdadero elixir de la felicidad. El planteamiento científico de estos señores fue el siguiente:

• Tomamos datos sobre muestras de ADN de muchos países (131)
• Identificamos y calculamos la distancia genética de los individuos de cada país con el ADN danés
• Ordenamos los países en función de su distancia genética con los daneses
• Comparamos el orden resultante entre la distancia genética y los rankings de felicidad de varios organismos reconocidos

… y tachan! cuanta mayor distancia genética al ADN danes menor puntuación en los rankings de felicidad! Es decir, cuanto mas genéticamente danes mas probabilidad de ser fenotípicamente feliz.

Quienes tengáis interés en leer la fuente original en lugar de quedaros con mi resumen de urgencia podéis hacer clic aquí.

Espero que mi larga lista de lectores que son biólogos o psicólogos no se echen las manos a la cabeza ante este planteamiento. Yo solo haré la reflexión de que la estadística nos permite hacer correlaciones lineales entre casi cualquier par de parámetros sin que una relación que sea de apariencia constante sea necesariamente causal…

Ruegos y preguntas

Espero que tras este ladrillito sigáis leyéndome.

Hasta la próxima entrada